¿Cómo elegir la toallita adecuada para salas limpias?

Los principales factores a tener en cuenta al comparar toallitas para salas blancas para la idoneidad son:

propiedades físicas y características

tratamiento de bordes

tamaño

Toallitas ESD
Clasificación ISO de salas blancas

Propiedades físicas y características

El sustrato de las toallitas es clave para determinar factores como la limpieza, la durabilidad, la capacidad de absorción de agua/disolvente, la resistencia al calor, la resistencia química, el recuento de partículas y el costo.

Toallitas prehumedecidas Las toallitas prehumedecidas son una excelente solución para la desinfección de superficies en salas blancas. Una de las principales ventajas de usar toallitas prehumedecidas es la comodidad de no tener que mezclar manualmente los disolventes de alcohol isopropílico y agua desionizada. Cada toallita contiene la cantidad exacta de alcohol isopropílico y agua desionizada, lo que ahorra tiempo a los técnicos al mezclar, rociar o aplicar la cantidad correcta de líquido para realizar el trabajo eficazmente. Estas toallitas también se pueden suministrar con agua WFI. Los técnicos simplemente abren la bolsa y extraen una toallita prehumedecida lista para usar. Las toallitas prehumedecidas también están disponibles esterilizadas para entornos de salas blancas de alta calidad. Para aplicaciones donde la cantidad exacta de alcohol isopropílico es crucial, se recomienda usar una toallita prehumedecida en lugar de humedecer manualmente una toallita seca.

Toallitas de poliéster Las toallitas secas de punto o tejidas se fabrican con un filamento continuo y tienen un bajo contenido de partículas, lo que las convierte en el sustrato más limpio. Las toallitas de poliéster ofrecen una alta durabilidad y resistencia; este sustrato resiste la abrasión bajo un uso riguroso. Nuestras toallitas continuas de poliéster para salas blancas, con baja formación de pelusa, se utilizan comúnmente para limpiar superficies sensibles, áreas de trabajo de investigación o productos terminados, y se utilizan ampliamente en salas blancas de Clase 10 (ISO 4) y Clase 100 (ISO 5). Pueden someterse a irradiación gamma para garantizar su esterilidad.

Toallitas no tejidas – un híbrido mezclado de celulosa y sintético proporciona capacidad de absorción adicional para la limpieza de derrames y la eliminación de líquidos espesos. Toallitas no tejidas Se utilizan comúnmente donde la retención de líquidos es importante. Son una de las toallitas más populares para salas blancas, especialmente para la limpieza general y el control de derrames en salas blancas con clasificación ISO Clase 5-6 y superior. Además de ser una de las toallitas más económicas, las toallitas no tejidas no dejan pelusa, son resistentes, tienen propiedades de resistencia química y bajos niveles de residuos no volátiles (NVR).

Tratamiento de bordes

La tela para toallitas se produce en rollos grandes y debe cortarse a medida. El simple hecho de cortar la tela puede generar partículas indeseadas, por lo que los tratamientos de los bordes ofrecen múltiples niveles de limpieza. Elegir el acabado correcto es fundamental, ya que determinará la aplicación correcta. Las toallitas hechas del mismo tejido, por ejemplo, "Poliéster", pero con diferentes tratamientos de bordes, pueden ofrecer múltiples niveles de limpieza. Los tratamientos de bordes más comunes son el corte con cuchilla y el corte láser.

Corte láser Estas toallitas se cortan con láser y se sellan los bordes mediante calor. El sellado láser de los bordes es más limpio que el corte con cuchilla fría, ya que los extremos de la fibra se funden sin dejar residuos. Son ideales para limpiar superficies sensibles, cabinas de bioseguridad, campanas extractoras y productos terminados, equipos y piezas. Estas toallitas con bordes sellados por ultrasonidos son aptas para ISO 3-4 (Clase 1-10) y superiores.

Corte de cuchillo El borde de estas toallitas está cortado con una cuchilla de acero, lo que puede dejar algunas fibras. Son una excelente opción para limpiar superficies como tableros de mesa, instrumentación, bancos de limpieza o áreas de investigación. Sin embargo, no se recomienda su contacto directo con el producto final, ya que existe el riesgo de liberación de partículas que podrían contaminarlo. Son aptas para ISO 5-6 (Clase 100-1000) y superiores.